Cambiar el orden establecido de las cosas, revelarse contra una forma de hacer que la mayoría considera correcta, luchar contra las normas que unos establecieron años atrás y que se siguen sin dar cabida a otras opciones, cambiar el plano de importancia del ser humano respecto al mundo, pasar de considerarse el centro del universo a parte de él, abrazar sin complejos a los sentimientos más desaforados, no tener miedo a intentar buscar la belleza, el miedo o lo sublime.
Los Románticos cambiaron las reglas del juego en el arte de principios del siglo XIX, decidieron romper con el neoclasicismo y abrazaron sin miedo a la capacidad de sentir que posee el ser humano. Rebeldes, dandis, adoradores al final de lo místico y capaces de sentir en extremo e intentar que los espectadores de sus obras lo hicieran también, nosotros en el terreno de los videojuegos no nos salvamos de sus influencias. Sin ir más lejos todos nos hemos rendido ante la majestuosidad y romanticismo que emana de ‘Shadow of the Colossus’. El gran juego romántico por excelencia.
Y es que salvando las distancias, el momento en el que llegó y todo lo que con él aprendimos, podemos trazar paralelismos con lo que se vivía a finales del siglo XVIII. No pretendo, por supuesto, sentar cátedra y este texto debe ser tomado como un análisis personal. A mi, como diseñador, me sirve para explicar el motivo por el que ‘Shadow of the Colossus’ es tan especial y el por qué su estética, su idea, su desarrollo y su feeling consiguieron cautivarme durante tanto tiempo. Quizá, lo admito, yo ya venía predispuesto a ello ya que soy un gran admirador de la obra de Caspar David Friedrich. Pero no nos adelantemos y empecemos esta bonita historia por donde se merece, a finales del siglo XVIII, justo cuando el neoclasicismo se encontraba en su punto más álgido.
Romper con las reglas establecidas
La belleza ideal, el aspirar a parecerse a la Roma Clásica, el racionalismo, la pulcritud, el mármol blanco, la perfección del círculo y de la línea, la concepción del hombre como ser todo poderoso, la recuperación de mitología antigua… seguir esas pautas era seguir la Ley. La influencia del neoclasicismo era abrumadora y sólo unos pocos rebeldes empezaron a plantearse otras cosas.

¿Y si a tanto uso de cabeza y raciocinio anteponemos el corazón y los sentimientos? El hombre no sólo tiene el don de pensar, reflexionar y resolver complicados problemas matemáticos. Sí, somos todo eso, pero somos mucho más que eso. El ser humano siente, se deja llevar por la rabia, tiene miedos, fobias, se enamora y en resumidas cuentas es un don nadie si se compara con la magnitud y el poderío del planeta en el que habitamos.
¿Qué es un hombre contra una montaña? Nada más que una hormiga. ¿Qué es el hombre ante la inmensidad de un desierto bañado por el sol? Una minucia.
Nacía el romanticismo (a nosotros para este ejemplo nos interesa coger sólo la parte de la pintura aunque el movimiento se inició años antes en la literatura) y con él muchos artistas empezaban a romper los lazos que les ataban al neoclasicismo. Una nueva manera de hacer las cosas, una nueva generación que ya no quería conseguir la belleza a través de la representación del mundo clásico y la perfección de las formas. En su lugar preferían buscarla en los sentimientos, en lo sublime, en el individuo como ser capaz de sufrir, sentir, imaginar y sobrecogerse por el entorno.

Expresar emociones humanas mediante el paisaje, las pinceladas, la luz, el contraste, la bruma…
Y ahora pensad en nuestros queridos videojuegos y viajad en el tiempo cinco o seis años atrás. Se trataba de divertir o de proponer acciones heroicas, épicas. Adrenalina a tope, habilidad para resolver un puzzle, mecánicas de juego que nos piden tener reflejos de felino o viajar a mundos de fantasía en los que recolectar ochocientos objetos, eliminar a doscientos enemigos para conseguir determinada llave y así ganar el don que permite atravesar una puerta. Sí, estoy exagerando, ya lo se. Pero intentad cerrar los ojos y difuminar el panorama (con sus honrosas excepciones) para que el símil funcione.
Y de repente, cuando las normas están establecidas, llega ‘Shadow of the Colossus’ y las rompe. Un juego con sólo unos cuantos enemigos a los que vencer, un título que nos pide poco más que caminar y contemplar la grandiosidad del paisaje verso a lo diminuto del protagonista, una aventura épica en la que nos movemos por impulsos y sentimientos, una capacidad de meternos en su historia y de hacernos “sentir” como ningún otro título antes.

Estaba el neoclasicismo para deleitarnos con la contemplación de la belleza clásica y llegó el romanticismo para hacernos sentir. Estaban los videojuegos, utilizando fórmulas más o menos clásicas con el único propósito de divertirnos y llegó ‘Shadow of the Colossus’ para hacernos sentir.
Ya hemos trazado puentes. Ahora conozcamos a Caspar David Friedrich.
No voy a hablar de la vida y milagros del genio alemán. Prefiero que nos quedemos con un concepto general de su obra en la que un simple hombre, que había experimentado el dolor que causa la muerte y lo indefenso del ser humano ante el devenir del destino, se enfrenta a lo desconocido e intenta que sintamos lo mismo que él contemplando sus paisajes.

Habilidoso dibujante y mejor paisajista paseó durante años por los agrestes rincones de Alemania y Suecia mientras tomaba apuntes y reflexionaba acerca de lo pequeño que es el ser humano. De lo insignificante que es ante la naturaleza, ante el destino, ante el transcurso de la vida. Por eso, contemplando la inmensidad de una llanura o la espesa bruma que inundaba los prados de Greifswald decidió compartir con nosotros esa sensación.
Nada tenían que ver los iconos clásicos o las escenas de la mitología griega, no. Simplemente el ser humano, de espaldas al espectador para situarnos todavía más en el cuadro y muy pequeñito para resaltar lo enorme del paisaje, enfrentándose a lo desconocido. Al terrible oleaje, a una puesta de sol entre árboles muertos, a unas montañas brumosas, a una tormenta, al inmenso mar, a un prado infinito, a las ruinas de una iglesia que alguna vez existió, la vegetación venciendo a una construcción gótica…

Recuerdos que una y otra vez evocan a lo pequeño del ser humano y lo indefenso que se encuentra ante los azares de la naturaleza (terrible momento para recordar esto justo unos días después del terrible tsunami que ha azotado a Japón). Paisajes solitarios, majestuosos, llenos de bruma… un intento loable de alcanzar la categoría de lo sublime.
Pensad ahora en lo que propone ‘Shadow of the Colossus’, difuminad la vista y veréis que no anda muy lejos de lo que Friedrich nos intentaba enseñar con sus cuadros.
Un hombre, Wanda, a lomos de su caballo, que debe recorrer un mundo majestuoso, solitario y sin habitantes. El hombre contra la naturaleza, o mejor dicho. El hombre empequeñecido por la naturaleza inabarcable. No hay personajes con los que interactuar, no se puede hacer una gran cantidad de cosas… consiste en avanzar lentamente hacia un inexorable destino atravesando paisajes áridos, casi desérticos, bañados de bruma y con una iluminación tan peculiar que no se ha vuelto a repetir en otro juego.

El sol quema más que nunca, la sensación de desasosiego no tarda en aparecer, la compañía de Agro se vuelve lo único que nos mantiene alerta y atravesar junto a él llanuras durante minutos y minutos de juego en los que no sucede (aparentemente) nada se convierte en algo habitual. Sí, el juego tiene trucos para que no nos aburramos y Agro cada poco tiempo quiere ir en otra dirección y nos obliga a corregirlo, pero en esencia estamos ante la misma experiencia que propone Friedrich.
Contemplar como la naturaleza aparece majestuosa e imponente ante un simple ser humano que, además, tiene la difícil misión de vencerla.
Y al igual que el Romanticismo, ‘Shadow of the Colossus’ aspira a lo sublime
Hemos hablado de lo sublime, pero ¿qué demonios es? No tiene una explicación clara o suficientemente sencilla como para ser reflejada en unas pocas líneas. A lo largo de la historia varios movimientos y pensadores, empezando por Longino en la antigua Grécia, lo han definido de diversas maneras. Una belleza extrema capaz de llevar al espectador a un éxtasis e incluso dañarlo estando precisamente ahí su atractivo, en la observación de objetos que amenazan con destruir o dañar al espectador (como la naturaleza dasatada) según los últimos estudios de Schopenhauer. Su significado se ha revisionado tantas veces que nosotros nos vamos a quedar con el estudio más romántico de todos.
Lo realizó el poeta alemán Joahnn Christoph Friedrich Schiller y en él distingue tres fases en el alcance de lo sublime. La fase contemplativa, en la que el sujeto se enfrenta al objeto, que es superior a su capacidad (véase la naturaleza, por ejemplo), el “sublime patético” en el que el sujeto se da cuenta de que su integridad física peligra y finalmente la “superación de lo sublime” en el que el hombre vence gracias a que es superior intelectualmente y asume su propia insignificancia.
Tres fases. Un hombre contra la inmensidad de la naturaleza, un hombre que entiende lo arriesgado y temerario de su afrenta y finalmente un hombre que de algún modo consigue sobreponerse al impacto gracias a su intelecto y se da cuenta de su verdadera y minúscula importancia.
Tres fases. Wanda sobreponiéndose a la inmensidad del árido paisaje que ha de recorrer, Wanda entendiendo que enfrentarse a sus oponentes colosales (representaciones de la naturaleza al fin y al cabo) es algo aterrador y finalmente Wanda venciendo gracias a su habilidad e intelecto, no gracias a su fuerza bruta o al dominio de las armas, para acabar comprendiendo que su luchaba contra un imposible.
‘Shadow of the Colossus’ representó para muchos un antes y un después. Para mi lo hizo. Un juego que no me pedía estar atento desde el primer momento, que no me proponía mecánicas tradicionales y que al contrario de otros me invitaba a pasear, a dejarme llevar por lo enorme, inexplorado e inabarcable de ese mundo. Un mundo en el que la aplicación de la luz se hacía de un modo pictórico, un mundo de construcciones antiguas y casi olvidadas, un mundo en el que Agro (mi fiel caballo) era mi único aliado, un mundo en el que la naturaleza había vencido al hombre y lo había reducido hasta un triste susurro… un mundo inabarcable que yo contemplaba desde una colina, apoyado en una roca, como en “El caminante sobre un mar de nubes”.

P.D. Todas las pinturas al óleo y bocetos, son obras de Caspar David Friedrich.
Wikipedia | Caspar David Friedrich, Romanticismo, Neoclasicismo Lo sublime en el romanticismo, Johann Christoph Friedrich Schiller
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cptmisson
No suelo postear demasiados comentarios en blogs y demás, pero creo que este artículo lo merece por un sencillo motivo:
Cuando uno ha trabajado o colaborado como crítico de videojuegos se da cuenta al poco tiempo de que la crítica está obsesionada con la descripción del producto y su puntuación. Al contrario de la crítica literaria o cinematográfica, que ha sabido desarrollar corrientes valorativas respecto a lo que una obra significa y por qué dicho significado es pertinente, la crítica de videojuegos se basa a priori en la generación de hype y, a posteriori, en una somera descripción pretendidamente objetiva del título en cuestión (gráficos, sonidos, etc...).
Pocos, muy pocos analistas de videojuegos, se atreven a pasar de eso, el análisis, a la verdadera crítica. Al menos en español. La quiebra de revistas como Xtreme dan buena cuenta de ello. Y es una lástima, después la comunidad de jugadores y creadores clama al cielo porque una mayoría social no acepta la idea del videojuego como fenómeno artístico. Bueno, es que a menudo esa misma comunidad tampoco cree en esa idea demasiado. Defender la idea del videojuego como medio artístico es más bien, para muchos, una excusa elegante con la que dar rienda suelta a su consumismo.
Si el analista no se convierte en crítico, poca visión puede aportar al videojuego, ya que no establecerá un rol de mediador entre la industria y la sociedad, valorando la significación y el valor cultural de un videojuego en el contexto político, social y económico que lo ha producido.
Por eso lo que Dani Candil ha hecho aquí es importante. Vidaextra es un blog que practicamente cualquier jugador hispanohablante conocerá, como Meristation, por ejemplo, y esa condición de medio masivo supone que la mayoría de periodismo que se hace tenga más un carácter informativo, anlítico-descriptivo que otra cosa. Es un blog útil para el jugador, pero ya está.
Dani Candil ha hecho que Vidaextra sea un blog útil para la sociedad en su conjunto, y espero muy sinceramente que Vidaextra sepa apreciar en la medida en que lo vale, lo que este crítico acaba de hacer por los videojuegos en su conjunto y por los creadores y jugadores en general: nos ha tratado como a adultos y ha defendido con argumentos la dignidad estética del videojuego.
Muchísimas gracias, Daniel.
P.D: Estoy enteramente de acuerdo en tu interpretación de Shadow of the Colossus como obra sublime en sentido romántico, si bien creo que también hay una gran influencia del paisajimo y los temas caballerescos prerrafaelitas. Asímismo, en "el arte de la composición", Edgar Allan Poe declara que no hay tema más romántico que el de la muerte de la belleza ejemplificado en el de la muerte de la amada. En fin, que podría estar horas hablando contigo de todo lo que es Shadow of the Colossus en la Historia del videojuego... ;)
zeus_of_xenon
Shadow Of The Colossus es un juego que lo tienen que jugar todas las personas, sin importar que les gusten los videojuegos o no, así de claro.
consolon
Señor Dani Candil, deje ponerme de pie y darle un aplauso.. muy buen articulo
arkfantasy
xD vaya, justo hoy iba a enseñarle a mi madre el juego.
Tengo la edición coleccionista en mi colección.
No olvidemos ICO tampoco :)
albertoski
Esperemos que "The Last Guardian" sea igual de épico y majestuoso como lo fue esta gran obra maestra :)
kabuki
y cuando empezaba a pensar que el bueno de villalobos era el erudito del grupo vas y nos das una candilreflexión que nos ha dejado con la boca abierta, si señor, esto solo lo puede hacer una persona que ama a los videojuegos, y mas a esa magnifica obra de arte digital que es para mi de lo mas grande del extenso catalogo de ps2.
ahora tienen el liston muy alto para superar a dicho juego con the last guardian, pero si alguien puede conseguirlo, es el mismo autor.
enhorabuena dani,me postro a sus pies si no le huelen
elbarsa10
Solo una palabra define este articulo "Sublime"
gorkamorka
Esto es un artículo como dios manda! precisamente estoy jugando shadow of the colossus ahora mismo por primera vez, lo empezé hace un par de semanas. Sin ponerle pegas al artículo sólo quería indicar q el romanticismo no surge como una voluntad individual "como respuesta al neoclasicismo" había cambios en la estructura social q explicaron su aparición, segurmanete el nacionalismo fué el mas importante de todos y por otro lado, como a cualquier ideario, a la ilustración se le empezaron a ver los problemas tras unas décadas de euforia. Ahora me vais a perdonar pero voy a dar mi opinión totalmente Nintendera, Shadow of the colossus es el único juego q he jugado para una consola de sony q tiene SABOR, el único en el que no tienes una sensación de deja vu respecto a la estética y el desarrollo. Creo q los nintenderos somos afortunados porque tenemos mas juegos a este nivel. Y por último, Shadow of the colossus habría sido imposible si antes no hubiésemos cabalgado por Hyrule a lomos de Epona, creoq todos estareis de acuerdo con eso
bahamut2
Shadow of the Colossus, obra maestra de la anterior generación. Sin duda me sorprende cuando hay gente que no lo ha jugado o no quiera jugarlo porque tiene "otros juegos", ya sea por su estética o por cualquier razón, pienso que es un juegazo de los pies a la cabeza, donde la ambientación juega el mayor papel y diferencia a este de los demás (al igual que ICO), una ambientación fuera de lo común con música ambiental el 90% del juego y música épica durante el otro 10%, lo que hace que te sumerjas completamente durante todo el viaje. Todos los detalles muy cuidados hasta lo más profundo del juego. De Fumito Ueda podemos esperar solo obras maestras, así lo era ICO, así lo fué Shadow Of the Colossus y así lo será The Last Guardian (llevan ya varios años desde que lo anunciaron, está claro que le están poniendo mucho mimo y no va a defraudar). Seguiré jugando todo lo que toque Ueda, Gracias! :D
zcullyx
Yo pensaba que estos posts corrían al cargo de Jose María Villalobos xD
Muy buen post.
antoniorubiolombilla
Precisamente me deshice de el hace años ya, tras terminármelo varias veces, me encanto, y ahora ando como loco por recuperarlo, cada x tiempo lo veo por el game así que la próxima aprovechare.
Aparte de ser un excelente juego, que lo es, me trae muchos recuerdos de aquel año 2006 tan especial para mi por muchos motivos, este juego forma parte de esa época para mi, es sublime, cada x tiempo desempolvo su banda sonora, y me meto un "viaje" por vena con semejante obra musical.
warhansen
Han habido grandiosos analisis, criticas geniales y un sin fin de articulos sobre esta maravilla llamada Shadow of the colossus, pero es la PRIMERA vez que leo que alguien logra plasmar en palabras el sentimiento y el significado de este juego, que va mas alla de ser, como bien dice el articulo, un simple entretenimiento.
saludos!
ghostkratos
Magnifico .. solo eso
nogueh
Sugiero más artículos de este tipo. Está más que claro que los videojuegos tienen un valor potencial mucho más allá del simple entretenimiento, la descarga de testosterona o para servir de niñera para olvidarse de los críos un rato. Los videojuegos pueden crear nuevas formas narrativas que el cine o la novela jamás igualarán. Los videojuegos pueden hacer vivir sensaciones nuevas. Los videojuegos pueden ser (y de hecho ya son) una forma de arte.
sickboy
Este articulo tiene que ir al AYBABTU, y a la pregunta de la semana "¿Cuan mucho te gusto el articulo de Dani Candil?(Y si me apuran tambien un "Primer Contacto" y posterior "Analisis" o algo asi para que mas gente lo lea)
eduardregincos
Si podemos describir y resumir los videojuegos en emociones, a mi me marcaron tanto sólo unas pocas. Entre ellas:
1) Los inicios del Ocarina of Time en Koikili Forest ;)
2) La introducción y BSO viendo pasar el tren que lleva al Sector 7 de Midgar en el FF VII: cada vez que vuelvo a empezar las aventuras de Cloud & cia. me emociono igual.
3) El final del MGS de PSX y sobretodo su vídeo en los créditos (ecologismo, antibelicismo.. que final)
4) Cuando aparece desde el barranco el penúltimo jefe de este Shadow of the Colossus (el 15: ARGUS, PRAESIDIUM VIGILO).
djc142
considerarse una obra maestra lo esencial de un videojuego i un punto de partida para nuevos proyectos para mi eso es shadow of the colosuss
deiv83
Genial artículo. Una obra como Shadow of the Colossus no se contempla muy a menudo.
Alfa-O
¡Genial!. Es la única palabra que se me ocurre ante tal post, la verdad, lo mejor que he visto en VidaExtra en los 2 años que llevo siguiéndola.
Un post único, como pocos. Me quedo con el primer párrafo, aque que dice:
Cambiar el orden establecido de las cosas, revelarse contra una forma de hacer que la mayoría considera correcta, luchar contra las normas que unos establecieron años atrás y que se siguen sin dar cabida a otras opciones, cambiar el plano de importancia del ser humano respecto al mundo, pasar de considerarse el centro del universo a parte de él, abrazar sin complejos a los sentimientos más desaforados, no tener miedo a intentar buscar la belleza, el miedo o lo sublime.
Esto me hace subir el hype aún más para la llegada de Ico & Shadow of the Colossus ya que nunca tuve la oportunidad de probarlos
Nuevamente, ¡genial post Dani!
destroyer87
Bravo! grande el artículo
MORT
Pues yo sigo sin comprender dónde está la majestuosidad de este juego, voy a tener que volverlo a jugar, porque cuando así lo hice en su día mi decepción fue tal que me pareció un juego mediocre, con un argumento plano y una jugabilidad pésima.
armadamaister
Probablemente el mejor artículo que he leido en vidaextra. Gracias.
kevin-z
me gusto mucho el articulo, creo que parte de la mistica que poseen algunos jueos como este lo lleban a ser parte de una experiencia unica asi como muchos otros.
no he tenido la oportunidfad de jugarlo completamente pero con lo poco que jugué me doy por satisfecho.
me gustaria agregar algo a tu entrada, y es que para que podamos romper las reglas de lo establecido y asi con ello crear algo nuevo y creativo debemos pasar por lo primero mensionado,los grandes movimientos artisticos asi como los garndes videojuegos llegaron a serlo por que lograron cambiar lo que ya venian haciendo y se renovaron para crear una nueva experiencia.si keremos romper la forma primero debemos conocerla, doy como ejemplo a Picasso
Left My Dead
Una obra de arte y un juego de culto en todos los sentidos,una novela brillante y perfecta; seas Xboxer o lo que sea, toca pasar´por caja y terminarlo, aunque tengo PC, me lo he pillado original y lo juego en emulador,
stranno
Se exagera demasiado el aspecto de "obra de arte" de SOTC dejando en segundo plano que es un juego -un juego, sin más- increíble, como si su aspecto jugable no importara nada, siendo una de las mayores experiencias jugables que se puede probar
De Shadow of the Colossus me quedo con que, después de 5 años y medio, sigue siendo el juego con la mejor animación de caballos de la historia. Cosa que dice bastante de la next-gen
Karpov1
El shadow of the colosus ha sido siempre uno de mis favoritos pero en un principio dudé de un juego con solo 18 enemigos. Después de jugarlo y después de mucho tiempo he entendido porque este juego atrapa y entretiene. Tiene cosas que tienen muchos juegos pero tan bien plasmadas y llevadas que ni te das cuenta de porque te gustan. Tiene exploración, porque tu eres quien debe encontrar a los enemigos y vaya si hay que dar rodeos. Tiene puzzles, porque aunque te den alguna pista debes descubrir como matar a un coloso. Tiene estrategia, porque no puedes escalar un coloso sin hayas una. Y tiene un sistema de escalada que es para mi uno de los sistemas que mejor simulan en un juego la escalada, algo de lo que ya podrían tomar cuenta los AC e infamous para enriquecerse aun más. El mérito de este juego es la inteligencia al implementar estas cosas tan típicas en muchos juegos
teikirisi
Yo soy fanático acérrimo de SOTC, uno de mis juegos preferidos. Pero admito que la gente lo sobrevalora demasiado. Como que tomó el título como estandarte para decir "los videojuegos pueden ser maravillosos" porque SOTC tiene una "semejanza" con lo que se denomina, o intenta denominar "arte".
Pongamos como ejemplo la historia del juego. Cual historia? resulta bastante pobre, y contada solo en 3 momentos (al iniciar, a la mitad del juego y al terminar). Claro que algunos se llenan la boca diciendo que eso es lo que hace al juego tan bueno. Por favor gente.
Repito, amo ese juego, pero no es para tanto. La simpleza no es siempre la mejor opción, así como tampoco lo es la complejidad.
25359
Felicidades por el artículo , genial.
usagi
Estoy impresionado y emocionado. No se qué más decir...